HISTORIA DE CANCIÓN 2: AHORA ME TOCA A MI

Ya es hora de no callar, de hablar tantas cosas que debí decirte hace mucho tiempo, al fin ha llegado mi hora, por favor ven aquí, solo siéntate, siento que hoy voy a hablar realmente por primera y última vez, toda nuestra vida se volvió en una obra que dirigiste bien, pero que ya termino, solo fue una farsa en la cual me diste el peor papel, la de un miserable hombre infiel y tú la indefensa víctima. . .

Veo tu cara de asombro, pensaras de qué estoy hablando, pero sé muy bien que en el fondo sabes que me diste el papel que más te ha convenido, ese que solo podía ir de la mano con tus mentiras, pero ahora calla, porque ahora soy yo el que hablo,  yo seré esta vez quien se lleva el aplauso. . .

 Ahora me toca a mí, decirte que todo lo que decías, tu vida y tú misma fueron una gran mentira,  Ahora me toca a mí, gritar que nunca me amaste, que nunca te importó más que tu propia vida,  Ahora me toca a mí, decirte que siempre demostrabas que eras una persona fría, indiferente, calculadora, Y ahora que me reclamas?, porque me señalas? qué esperabas?, es verdad, te engañe, y aunque lo niegues se que  era lo que tú buscabas. . .

Ahora me toca a mí, ya me cansé de ser siempre el que calle, todo porque con tus engaños me hacías sentir el culpable,  Ahora me toca a mí, gritar y decirte que todo lo que paso fue también porque tú te equivocaste,  Ahora me toca a mí, con todo lo que se volvió mi vida, no me dejaste más que un solo camino,  y fue robar en la calle todo ese amor que no tuve contigo. . . 

Se que ahora aquí se termina toda nuestra historia, no hay nada más que hablar, ya todo se acabo en mi,  hoy fue la última noche de nuestra función, de esta triste novela que creaste de nuestro amor, Ahora sin caretas, sin falsos gestos, sin maquillaje al fin, se va el payaso aquel, ese que creaste de mi, y que solo vivió, simulando reír, cuando lo único que acabo, fue muriéndose entre tus brazos. . .

Se que estas aburrida de todo este cuento, y quien sabe a nadie convenceré con mis argumentos, pero no importa ya, porque yo se que por más que aún siga pensando la gente, que en este final yo fui el verdugo y tú la inocente. . . sé que al final me toco a mi reír, decidir y desnudar esa triste mentira que ahora no será mas parte de mi vida…y al final la payasa fuiste tú…