PALABRA

Siempre me considere un hombre de palabra, siempre sustente con hechos lo que quería y prometía hasta el punto de juzgar a quien no lo hacía, pero el tiempo y la vida me ha enseñado que no siempre es así, que igual que los años pasan, pasan las ideas, los sentimientos, las ganas, las arrugas no vienen solas, lamentablemente a veces se cambia mas en el interior…

Durante años me hice muchas ideas de las cosas de lo que haría en tal o cual situación, y estaba seguro de cumplirlo, pero nunca considere lo que otros podían sentir con mis decisiones, con mis actitudes, creí que las mías eran las correctas, las más sanas, y no fue así, no considere que a veces la gente no busca eso, y en esa insatisfacción causaba daño, volviéndome justo en lo que evitaba y odiaba ser…

Hace algún tiempo sentí algo muy grande que pensaba que nunca se acabaría, y en el mejor momento de este gran amor, jure que nunca dejaría, que mi vida junto a la otra extinguiría,  de verdad que lo sentía así, pero algo paso, la magia se rompió, o simplemente ese gran sentimiento era una ilusión… les juro que escarbe dentro de mi corazón para resucitar sensaciones, celos, nostalgia, angustia, pero no halle nada… nada

Ahora esa sensación que me era indispensable para existir me es vaga, ese ser que se volvió sangre para mis venas, ahora solo es una extraña que al despedirse, se va con todo y recuerdo cada día, como se puede olvidar tanto y tan rápido??, no lo sé, no puedo creer ni entender, y con más rabia mato mi corazón en el afán de hacerle ver que las marcas no se borran, que lo juramentos se cumplen, que lo dado y recibido  no fue un sueño, pero quien manda en amor? nadie; y ahora que hago con el dolor?? Yo se que algo se alivia dentro de mí porque hasta en eso el corazón me dice: ríe, el dolor no te toco a ti…

Me torturo día a día: como le digo?? Como recupero mi libertad a costa de mi palabra?, como caminare sin mirar atrás y no decirte lo siento, que no fuiste nada, que tu amor no me lleno,  si en el fondo siento que nada lo llena, que me dieron un corazón sin fondo, o uno que no sabe amar; como contare esta historia para quedar como el héroe de la honestidad, cuando fui el verdugo de tu amor, el malvado de tu historia; como se puede salvar a alguien si la matas en el rescate; ahora sé que mi palabra no vale nada, que jurar solo es un buen deseo que solo vale el instante que se dice, que tonto soy, pero más pena me da lo que hice de ti, que fuiste más tonta por creer en mí; y lo peor, siento que la historia se repite y repite… como ahora…y ese es lo único en mi vida, que sin jurar, se que siempre cumpliré…